En diferentes puntos de la ciudad también se replicaron homenajes, recitales de música y poesía, convirtiendo a León una vez más en la capital del arte y la cultura de Nicaragua.
León, la ciudad amada del príncipe de las letras castellanas Rubén Darío, fue sede de una serie de homenajes rendidos a su memoria, en el 104 aniversario de su tránsito a la inmortalidad.
Desde horas tempranas, cientos de leoneses, estudiantes, autoridades locales y comunidad universitaria se reunieron en el Paraninfo de la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua ( UNAN-León) para luego dirigirse a la casa donde el Panida exhaló su último aliento, en el barrio El Coyolar.
El alcalde Roger Guardián refirió en la ceremonia que la ciudad le rinde homenaje permanente, a su obra, a su pensamiento y a sus ideales.
“Porque son los que campean hoy en el horizonte de nuestra juventud. A Rubén Darío, el que preconizaba la unidad latinoamericana y caribeña, la convivencia universal, la paz, el trabajo. ese es el Rubén que hoy estamos conmemorando”, manifestó.
Frente a la placa instalada en la fachada del inmueble, fueron entonados coros y poesía para Darío.
Después, autoridades de Gobierno acompañaron a los leoneses hacia la Real Insigne Basílica Catedral, para depositar ofrendas florales en el sepulcro del poeta.
El compañero Gustavo Porras, presidente de la Junta Directiva de la Asamblea Nacional, comentó que se trata del héroe cultural de los nicaragüenses.
Es “nuestra guía y además todos nosotros estamos claros que era un genio, un revolucionario, un profeta. Si nosotros leemos las poesías de Darío, todas ellas son una profecía y están vigentes hoy. Si leemos la oda a Roosevelt está vigente hoy, entonces creo que esa es la enorme fortaleza que tenemos los nicaragüenses”, añadió.
El arquitecto Luis Morales, director del Instituto Nicaragüense de Cultura, señaló que quienes lo atacaron, como Octavio Paz, también lo continuaron y le llamaron “el libertador”.
“Hoy León se viste de gala, se organiza con flores, con danza, con música, para conmemorarlo en éste mausoleo del mundo como ningún otro escritor en el mundo tiene”, dijo.
En diferentes puntos de la ciudad también se replicaron homenajes, recitales de música y poesía, convirtiendo a León una vez más en la capital del arte y la cultura de Nicaragua.
