El Día de la Dignidad Nacional, efeméride que recuerda el nacionalismo del General de Hombres y Mujeres Libres, Augusto Calderón Sandino, quien escribió una de las páginas más memorables de la Historia de Nicaragua, cuando se rebela ante la propuesta para deponer las armas, hecha por el enviado yanqui, coronel Henry Lewis Stimson; todos los generales aceptaron la humillante propuesta, menos uno: el General Sandino, quien defendió hasta la muerte la soberanía de su país.
“Un muchacho de Niquinohomo”
La fecha del 4 de mayo de 1927 quedó marcada en la historia como el día en que el General Augusto C. Sandino se negó a firmar el Pacto del Espino Negro que lesionó la Soberanía Nacional, y se rebeló contra las tropas interventoras del imperio yankee que se encontraban en el país.“Mi inspiración es rechazar con dignidad y altivez, toda imposición en mi país, de los asesinos de los pueblos débiles.” – Augusto C. SandinoCon la firma del pacto, el 4 de mayo de 1927, bajo la sombra de un árbol de espino negro, Moncada aceptó entregar las armas a cambio de prebendas dejando en el poder al mismo gobierno impuesto por los yanquis. La rebeldía de Sandino ante ese pacto constituye el primer antecedente de la Revolución que alcanzó la victoria el 19 de Julio de 1979. A partir de ese día Sandino elige el camino de la lucha y se enmontaña con su Estado Mayor en Las Segovias, desde donde inicia su ofensiva contra el ejército gringo, instalado en Nicaragua para tomar las decisiones políticas del país. Durante la Revolución Sandinista (1980-1990), en contraposición a este pacto entreguista de la oligarquía liberal-conservadora, por Ley se declaró el 4 de mayo como «Día de la Dignidad Nacional», en conmemoración de ese acto de patriotismo y dignidad de ese hombre de origen humilde y campesino, que, con un puñado de hombres se enfrentó al Ejército más poderoso del mundo. Hoy, las familias nicaragüenses lo celebran con regocijo y orgullo popular, manifestando y promoviendo el valor patriótico que un día como éste representa en la memoria de cada ciudadano que hoy vive en una Nicaragua libre de dictadura y de represión gracias a la gesta del General Sandino, recordando así su lucha contra la intervención militar estadounidense, en la defensa de la soberanía, la independencia y la integridad del país.