Gaza, lágrimas de humanidad, no de miedo ni de cobardía
Ramón Pedregal Casanova
La peor noticia que puede dar una persona que dedica su trabajo al cuidado de quien necesita atención médica es declarar que no le es posible salvar la vida de una persona herida o enferma.
En el caso de Palestina la Ministra de Salud, Maii Al-Kayla, declaró el martes día 24 que el sistema de salud en la Franja de Gaza ha colapsado se ha desplomado, se ha derrumbado, por lo que declaró en rueda de prensa en Ramalla que “todos los pacientes o heridos en los hospitales de la franja de Gaza están amenazados de muerte. El colapso significa que a partir de hoy todos los heridos incluidos niños mujeres y ancianos están perdiendo servicios de tratamiento los pacientes de cáncer sin medicamentos y sesiones de quimioterapia los pacientes renales se verán privados de sesiones de lavado, cientos de bebés prematuros están en riesgo, miles de heridos siguen siendo heridas abiertas.
La Ministra Mail Al-Kayla hizo un llamamiento a “la comunidad internacional y sus organizaciones e instituciones para que intervengan para salvar a nuestro pueblo en la Franja de Gaza de una amenaza real y desafortunada para sus vidas. Les pido una intervención urgente e inmediata y una mayor presión sobre el gobierno de ocupación israelí para que lleguen combustible, medicinas suministros médicos, gases medicinales, alimentos apropiados y agua potable, que puedan salir los heridos para recibir tratamiento médico en Egipto y vengan equipos médicos voluntarios a apoyar al personal de salud de la Franja de Gaza.
Desde Gaza el portavoz del Ministerio de salud de Gaza anunció el martes “el colapso total de los hospitales a consecuencia de la guerra sionista desde el 7 de octubre”.
En esa fecha todas las organizaciones del Pueblo Palestino, la Resistencia como Movimiento de Liberación, ante los continuos ataques del ejército colonial y sus bandas paramilitares de colonos contra la población, sus bienes y sus Santos Lugares, especialmente la mezquita de Al Aqsa, optaron por dar respuesta a las agresiones.
La guerra de ocupación emprendida contra Palestina desde 1948 para robar el país expulsando a sus habitantes se extiende desde entonces sin que el Pueblo Palestino haya dispuesto de un solo día de paz, y el agresor invasor, que no cumple los requisitos mínimos para formar parte de la ONU e incumpliendo todas y cada una de las resoluciones dictadas en el organismo internacional, habiendo sido declarado su accionar, ocupación de tierras, creación de asentamientos coloniales, robo de tierras, del agua, expulsión de sus habitantes, no reconocimiento como ciudadanos del pueblo originario, no permitir la vuelta de los seis millones de refugiados, el encarcelamiento de miles de prisioneros que hoy se cuentan más de 5000 y desde 1948 suman más de un millón, todo ello considerado como crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad, el ocupante continúa impune y protegido por el imperio de hoy y los regímenes europeos que han sido imperio.
Nunca hicieron nada por el Pueblo Palestino ante tanta opresión, y ahora cuando la Resistencia Palestina en su Derecho así reconocido en la Legalidad Internacional se defiende, esos mismos regímenes protectores del ocupante colonial lanzan una campaña de falsedades sobre lo acontecido y se disponen a respaldar con armas y propaganda a su pupilo.
Como informador os comunico que desde el 7 de octubre los sionazis han asesinado a 22 periodistas Palestinos y han bombardeado sus casas directamente, como castigo por informar, asesinando a muchos de sus familiares.
Ayer en la tarde llegaba la noticia de la persecución de Wael Al-Dahdouh, director de la oficina del canal satelital Al-Jazeera en la franja de Gaza. Los sionazis habían bombardeado su casa en el campo de Nuseirat matando a su esposa y a sus dos hijos, además de otros familiares y vecinos.
Estaba transmitiendo en directo el bombardeo de la ciudad de Gaza y recogiendo declaraciones de afectados cuando le comunicaron el asesinato de su esposa y sus dos hijos, un adolescente y una niña. Tras encontrarlos y abrazarse a ellos declaró: “Teníamos dudas de que la ocupación no dejaría este asunto impune, (la cobertura de prensa que hacía), y esta área es una de la que la ocupación dijo que era segura, pero este es el ejército que dice ser ético.
Nuestro desastre es grande, especialmente contra los niños y las mujeres, pero este es nuestro destino y nuestra elección, y no nos desviaremos de este camino”. Wael Al.Dahdouh dijo despidiendo a su hijo entre lágrimas: “Ellos (el invasor) se vengan de nuestros hijos. Alabado sea Dios. A dios pertenecemos y a Él regresaremos. Al-Dahdouh abrazó a su hijita en una escena conmovedora y declaró: “Estas son lágrimas de humanidad, no lágrimas de miedo ni cobardía. Que el ejército de ocupación se desanime”.
El Pueblo Palestino defiende su Patria, su País, y lo hace con lo que la Ley Internacional le reconoce como defensor frente a una fuerza colonial que ha se manifiesta contraria a todo compromiso legal. El Pueblo Palestino, bajo el sometimiento de la fuerza colonial ocupante desde 1948, viene defendiendo el Derecho de todos los pueblos del mundo a vivir en su propio país.
Personal médico y personal informativo trabajan en campos en los que se deplora la corrupción y el servilismo al criminal, dos campos cuyos trabajadores verdaderos solo se escudan en una gran humanidad. Reciban nuestro fraternal abrazo.
Viva Palestina Libre.
Ramón Pedregal Casanova es autor de los libros: Gaza 51 días; Palestina. Crónicas de vida y Resistencia; Dietario de Crisis; Belver Yin en la perspectiva de género y Jesús Ferrero; y, Siete Novelas de la Memoria Histórica. Posfacios. Presidente de AMANE. Miembro de la Asociación Europea de Apoyo a los Detenidos Palestinos. Internacionalista e integrante de la Red de Artistas, Intelectuales y Comunicadores Solidarios con Nicaragua y el FSLN.
