Gobierno de Nicaragua envía felicitaciones al Papa Francisco en su cumpleaños 83
A continuación mensaje íntegro:
Managua, 17 de Diciembre, 2019
Su Santidad
Hermano Papa Francisco
Sus Manos
Santo Padre, Hermano Papa Francisco :
A Usted, Santo Padre, en sus 83, todo nuestro Respeto, Cariño y Reconocimiento, por su incansable labor de promoción de verdaderos Valores Cristianos, desde la Fé y la Fraternidad que és Concordia y Derecho a la Vida Digna, Justa, Verdadera, para tod@s.
Recibimos con entusiasmo cada Mensaje suyo, como Doctrina Milagrosa y Fomento Visionario de Prácticas indispensables para que tod@s, en el Mundo, procuremos ser mejores.
Siempre le leemos con atención, admirando su Valentía, y tratando de aprender de su Vitalidad y Coraje, para ser capaces, cada día, de trabajar por un Ser Humano, un País y un Mundo, más allá del egoísmo y más centrado en nuestra imprescindible Concepción de Familia y Comunidad.
Usted nos enseña a asumir los desafíos de estos Tiempos, y con Usted seguimos aprendiendo a ver el Rostro Luminoso de Cristo Jesús, salvándonos de la indiferencia y la tentación permanente de cerrar puertas y corazones.
En este 83 Cumpleaños, a Usted nuestras sentidas y genuinas Oraciones, pidiendo al Redentor que nos siga Usted iluminando con su Sabiduría.
Dios y la Virgen le den la Gracia de seguir contando con salud, lucidez y voz que clama al Mundo para que el pecado capital de la Pobreza, que nos humilla y pervierte a tod@s, se enfrente con Conciencia de Amor, Generosidad y Decisión de Trascendencia.
Siga Usted Adelante, Hermano Papa Francisco, que con Usted seguimos en la batalla permanente, para que desde la Fé y los Caminos de Paz y Ternura, nos sintamos cada vez más comprometidos con el Mundo que nos exige cambios profundos a cada un@, y a tod@s.
Tenga Usted un Buen Día, y muchos Buenos Días, para seguir siendo Luz y Verdad, Esperanza Cierta para todos los millones de Seres Humanos que queremos vivir sin discriminación, sin exclusión, sin descarte, y con Derecho a la Dignidad, al Bienestar y a la Vida Plena.
Siempre acompañándole, inspirados y alentados por su Misión Profética.