Nicaragua conmemora el Día Internacional de la Lucha Contra el Racismo
El 21 de marzo, los pueblos del mundo conmemoran el Día Internacional de Lucha Contra el Racismo, un terrible flagelo que ha causado enorme sufrimiento a lo largo de la historia humana, destruyendo civilizaciones enteras y entorpeciendo el desarrollo de otras.
Desde la trata transatlántica de esclavos africanos hasta el genocidio cometido en contra del Pueblo Judío, el Racismo y la Discriminación en sus múltiples y nefastas manifestaciones ha sido el sustento de las ideologías y prácticas más crueles y odiosas.
Frente a este terrible enemigo, sin embargo, han surgido Héroes Poderosos, Hombres y Mujeres que sin vacilar han luchado por la igualdad, la Equidad, la Paz, la Solidaridad l Fraternidad entre Pueblos Hermanos.
En esta importante fecha y en todos los días del año, Nicaragua celebra el legado de Titanes de la Humanidad como Mahatma Gandhi, Martin Luther King, Simón Bolivar, Nelson Mandela, Desmond Tutu, Malcolm X, entre tantos otros, además de nuestros propios Faros de Libertad, Benjamín Zeledón, Augusto Calderón Sandino, Rigoberto López Pérez, Carlos Fonseca Amador y tantos otros, que hicieron el máximo sacrificio para que todos las y los nicaragüenses pudiésemos vivir en un País más Libre, más Digno y más Equitativo.
En Nicaragua, la Revolución Popular Sandinista de 1979 supuso una ruptura con estas políticas racistas de gobiernos conservadores y liberales, así como con las promulgadas por el Régimen de Somoza, permitiendo una mayor visibilización de los Pueblos Afrodescendientes.
La Revolución Popular Sandinista 1979 y la Constitución Política de la República de Nicaragua de 1987, reconoce por primera vez la naturaleza multiétnica y pluricultural de la nación nicaragüense, sentando las bases para la aprobación del Estatuto de Autonomía de las Regiones Autónomas (Ley 28) en ese mismo año. La Carta Magna, la Ley 28 y otras legislaciones referidas a Derechos de Pueblos Originarios y Afrodescendientes se basan en el principio de la libre autodeterminación y la no discriminación por motivos de raza, etnia, cultura, religión o creencia espiritual, lengua, entre otras.
Aun cuando los Derechos de los Pueblos Originarios y Afrodescendientes estuvieron plenamente reconocidos dentro del marco jurídico nacional, los Gobiernos Neoliberales que gobernaron entre 1990 y 2006 no priorizaron el desarrollo de la Costa Caribe, la mejora de las condiciones de vida de estos pueblos, ni el ejercicio efectivo de sus derechos.
Es hasta en el año 2007, con el Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, que se lanza la Estrategia de Desarrollo Humano de la Costa Caribe, con el objetivo de promover el crecimiento económico con estabilidad macroeconómica y destinada a orientar objetivos específicos relacionados con el empleo, la reducción de la pobreza, la igualdad, la nutrición, el acceso a salud y educación, la seguridad ciudadana, la productividad, la promoción de las inversiones y el comercio, entre otros.
El derecho a la libre autodeterminación se entiende como el derecho de un pueblo a decidir sus propias formas de gobierno, alcanzar su desarrollo económico, social y cultural, y estructurarse libremente sin injerencias externas.
23 territorios de Pueblos Originarios y Afrodescendientes fueron demarcados y titulados entre el año 2007 y 2016, integrados por más de 301 comunidades que abarcan una extensión territorial superior a los 37,252.91 kms2, con más de 205,315 habitantes, representando el 49% del territorio nacional, el 52% del territorio de las Regiones Autónomas y la Zona del Régimen Especial del Alto Wangki, Wihta y Bukawas. Este porcentaje aumentará al concluirse el proceso de demarcación y titulación de las dos áreas complementarias de la Zona del Régimen Especial del Alto Wangki y Bocay.
A través del Programa Hambre Cero, siendo implementado desde el año 2007, se ha priorizado la recuperación de los saberes ancestrales de Pueblos Originarios y Afrodescendientes, su autoestima y soberanía alimentaria. Este programa ejecutado por el Ministerio de Economía Familiar, Comunitaria, Cooperativa y Asociativa (MEFCCA), entregando decenas de miles bonos a comunidades indígenas y afrodescendientes de la Costa Caribe de Nicaragua. Casi la mitad de las y los protagonistas están integrados en pequeñas cooperativas y junto con la entrega de los insumos, el MEFCCA ofrece asesoría técnica en aras de que logren multiplicar y comercializar su producción.
En las Regiones Autónomas de la Costa Caribe, se estima que los proyectos de agua potable, actualmente en ejecución, permitirán que la cobertura de agua potable sobrepase el 70%, garantizando acceso continuo a agua de calidad durante todo el año.
El Sub sistema de Educación Autonómica Regional (SEAR) incluido en la Ley General de Educación (Ley 582), promueve la gestión descentralizada y autónoma de la Educación en las Regiones Autónomas y responde a las realidades, necesidades, anhelos y prioridades educativas de su población multiétnica, multilingüe y pluricultural. Este subsistema, se orienta hacia la formación integral de niños y niñas, jóvenes y adultos, hombres y mujeres en todos los niveles del sistema educativo, así como en el respeto, rescate y fortalecimiento de sus diversas identidades étnicas, culturales y lingüísticas.
La Educación se imparte en las lenguas maternas de los pueblos indígenas y pueblos afrodescendientes en más del 70% de escuelas en comunidades indígenas y afrodescendientes. Existe además un Plan Septuagenal de Educación 2014-2021 para el Caribe, aprobado mediante resolución de los Consejos Regionales Autónomos para continuar mejorando la calidad y pertinencia de la Educación Monolingüe y Bilingüe Intercultural en todos sus niveles.
La educación primaria se fortalece con el emblemático programa de merienda escolar que provee la nutrición infantil, la retención escolar y el buen desempeño académico.
La Ley General de Salud (Ley 423), establece en su artículo 11, que las Regiones Autónomas de la Costa Caribe podrán definir un modelo de atención de salud conforme a sus tradiciones, culturas, usos y costumbres dentro del marco de las políticas, planes, programas y proyectos del Ministerio de Salud para lo cual se deberán establecer las coordinaciones pertinentes con los Gobiernos Regionales Autónomos y los Gobiernos Territoriales y Comunales. En ese sentido los Gobiernos Regionales han creado Secretarías de Salud para contribuir a mejorar las prácticas administrativas, las políticas, normas y procedimientos salud en las Regiones Autónomas y particularmente en las comunidades indígenas y afrodescendientes.
El modelo de salud de las Regiones Autónomas atendiendo a lo establecido en el Artículo 60 de la Ley 423, tiene como principios: (i) la integración; (ii) la participación social, en particular de los pueblos indígenas y afrodescendientes; (iii) la revitalización cultural; (iv) la reciprocidad y la solidaridad social de los diferentes actores y sujetos sociales involucrados y (v) la equidad en la atención.
De conformidad a la Ley 759, Ley de Medicina Tradicional Ancestral y su Reglamento, aprobados en 2012, se creó el Instituto Nacional de Medicina Natural, Tradicional y Terapias Complementarias (IMTC) del Ministerio de Salud, lo que ha permitido que el sistema de salud en la Costa Caribe de Nicaragua acceda a un vasto acervo cultural de prácticas tradicionales de los pueblos afrodescendientes e indígenas de Nicaragua, que usan plantas, semillas, frutas, insectos y animales para el tratamiento de distintos padecimientos.
Las inversiones en Salud en las Regiones Autónomas han incrementado de US$32 per cápita en 2006 a US$70 en 2018. La desnutrición fue reducida en 50%, la mortalidad infantil en dos tercios y la mortalidad materna de 118 a 50.6 por cada 100,000.
En materia de Salud se han realizado inversiones importantes en el Hospital Escuela Ernesto Sequeira de Bluefields, RACCS, que actualmente cuenta con un moderno departamento de Oncología. Se mejoraron las instalaciones de los Hospitales Primarios de Kukra Hill y Laguna de Perlas en la RACCS. En Corn Island se construyó el Hospital Primario Ethel Kandler y se ha anunciado la construcción del Hospital Regional de Bilwi en este año 2020. Se ha invertido en un Moderno Centro de Salud en el Municipio de Siuna y se han mejorado las Casas Maternas en todo el territorio de la Costa Caribe, permitiendo una atención adecuada en un periodo menor a las 24 horas a la mujer embarazada o en labor de parto, contribuyendo a la reducción de la mortalidad materna y la mortalidad materno infantil.
Asimismo, el reforzamiento de la Atención Primaria en Salud (APS) ha contribuido a la prevención de enfermedades infectocontagiosas, así como a la captación temprana del embarazo. De igual manera se ha mejorado la atención a pacientes con necesidades especiales, pacientes de la tercera edad y pacientes con enfermedades crónicas no transmisibles.
El Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional también entiende que el racismo y la discriminación tiene múltiples y complejas manifestaciones, siendo particularmente dañino para niñas, niños, mujeres, personas LBGT y personas con capacidades diferentes que pertenecen a un determinado grupo étnico o racial.
En ese sentido el Estado de Nicaragua ha establecido leyes y políticas para garantizar la protección y participación efectiva de los grupos más vulnerables. Nicaragua actualmente es el país más equitativo del hemisferio americano en términos de la participación política, social y económica de la mujer.
Este año, el Día Internacional de Lucha contra el Racismo se celebra bajo el lema “Racismo y Deporte”, denunciando el racismo en contra de valientes atletas que han sido víctimas de este flagelo, pero también reconociendo que el deporte constituye un instrumento fundamental para contribuir a la tolerancia, la empatía y el entendimiento.
El Deporte en Nicaragua celebra y se enaltece con las valiosas contribuciones de tantos deportistas indígenas, afrodescendientes y mestizos que enorgullecen a Nicaragua con su grandioso talento.
El Pueblo y Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional de la República Nicaragua extiende su abrazo fraterno y solidaridad absoluta con las víctimas del racismo y la discriminación, asumiendo el compromiso invariable de continuar trabajando por un mundo más justo y equitativo, en el que todos los Pueblos y todas las Personas, sin distinción alguna, podamos vivir en Paz y Armonía.
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