Nicaragua en reunión de la Alianza Global para implementar la solución de dos Estados
MENSAJE DEL GOBIERNO DE RECONCILIACIÓN Y UNIDAD NACIONAL DE LA REPÚBLICA DE NICARAGUA EN LA PRIMERA REUNIÓN DE LA ALIANZA GLOBAL PARA IMPLEMENTAR LA SOLUCIÓN DE DOS ESTADOS
Señor Presidente,
Estimadas y Estimados Representantes de los Países que nos acompañan en esta reunión, Desde esta Nicaragua Bendita y Siempre Libre, permítanme extender los fraternos saludos del Presidente de la República de Nicaragua, Comandante Daniel Ortega Saavedra, de la Vicepresidenta Compañera Rosario Murillo Zambrana, del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional, así como de todo el Pueblo de Nicaragua.
También aprovechamos esta oportunidad para expresar nuestro profundo agradecimiento, respeto y reconocimiento al Reino de Arabia Saudita, a sus Autoridades, Su Majestad el Rey Salman bin Abdulaziz, Custodio de las Dos Sagradas Mezquitas, y a Su Alteza el Príncipe Mohammed bin Salman, Príncipe Heredero y Primer Ministro, por acoger esta reunión. Que Dios les bendiga y les conceda salud, paz y bienestar.
Nicaragua participa en este espacio, con mucha esperanza y optimismo, confiando en que marcará el inicio de una solución definitiva al conflicto y así alcanzar la fundación del Estado Palestino.
Hoy nos congregamos para abordar una causa de carácter político, humanitario y de justicia, que exige nuestra defensa con la máxima seriedad. Nos encontramos ya cansados de dobles raseros; es claro lo que es permitido y lo que es prohibido.
No estamos aquí para hablar de una solución para los refugiados; estamos aquí para hablar del regreso a su patria. Por lo tanto, debemos hablar de retorno, y no de solución, ya que deportarlos y matarlos se considera una solución, y por lo tanto se debe utilizar el término retorno en lugar de solución. Nuestro propósito debe ser asegurar el retorno de los refugiados a su patria, y no buscar otros términos para ocultar el verdadero objetivo.
Ante los crímenes de lesa humanidad que el mundo entero ha presenciado y continúa presenciando, el silencio debe ser interpretado como una forma de complicidad. Pero no sólo el silencio es complicidad, Nicaragua denuncia y condena a los gobiernos que continúan financiando este genocidio, aquellos países habilitadores que todos los días deciden entregar cada vez más armas para que se siga matando al Pueblo Palestino.
Nuestras posiciones deben definirse sin ambigüedades: o se está del lado de los derechos del pueblo palestino y el establecimiento de su Estado libre e independiente, o se sigue fomentando una guerra de exterminio. Para Nicaragua este asunto está claro y siempre apoyaremos la lucha del Pueblo Palestino en su incuestionable derecho a la Independencia, la Soberanía y la Autodeterminación.
Extendemos nuestro respeto a la Autoridad Palestina, que ha dado lo mejor de sí, ha hecho sacrificios y ha aceptado divisiones de su tierra para que otros pudieran habitarla, como quien divide su casa en dos, reservando una mitad para el huésped. Tristemente, el huésped ha usurpado toda la casa, dejando a la familia original despojada. Es un claro ejemplo de cómo la generosidad a veces enfrenta la ingratitud.
La postura palestina ha nacido del compromiso de hallar una solución integral, justa y definitiva al conflicto con Israel, adhiriéndose a todos los acuerdos en este marco.
No hay justificación alguna para que cualquier Estado miembro de las Naciones Unidas posponga su reconocimiento del Estado palestino, especialmente considerando las resoluciones internacionales que reafirman una solución de dos Estados y cuentan con un consenso prácticamente global.
El silencio ante las injusticias y los crímenes cometidos contra el pueblo palestino es una forma de complicidad y traición a los principios de humanidad.
La solución de dos Estados es ya una exigencia internacional en virtud de las leyes, costumbres y legitimidad global. Es insostenible seguir ignorando esta situación, y la historia recordará con vergüenza a aquellos que contribuyeron al sufrimiento del pueblo palestino durante casi ocho décadas, permaneciendo en silencio ante las injusticias morales, políticas y humanas que los afectan. Nicaragua continuará condenando en todos todos los espacios y alzando su voz de manera firme e inquebrantable, en contra del brutal genocidio que se está cometiendo contra el Pueblo Palestino.
Callar y mirar hacia otro lado ante estas masacres es en sí mismo un crimen. ¿Qué estamos esperando? ¿Acaso no son suficientes las miles de víctimas de niños, mujeres y hombres y casi un millón y medio desplazados para defender la justicia y poner fin al sufrimiento del pueblo palestino? ¿Es necesario más dolor para que despertemos? Ya es tiempo de expresar nuestro apoyo inequívoco a un Estado palestino. Continuar en silencio sería una deshonra ante Dios y la humanidad.
No se puede seguir postergando la existencia e independencia del Estado de Palestina. Nicaragua apoya firmemente el establecimiento de un Estado Palestino Libre, Soberano, Independiente y con total Autodeterminación, conforme a las resoluciones de legitimidad internacional, con las fronteras de 1967 y Jerusalén Este como su capital.
No debemos permitir que un único Estado Israel manipule la legitimidad internacional y ponga en riesgo la paz y la seguridad internacionales. Es tiempo de definir posiciones claras y de alejarse de los dobles estándares en temas de justicia y autodeterminación.
La causa palestina ha sobrepasado cualquier límite de humanidad y ética durante más de 80 años, y nuestra inacción nos hace cómplices. Es hora de poner fin a esta tragedia, o de lo contrario seguiremos contribuyendo a este sufrimiento.
Muchas Gracias.
MESSAGE OF THE GOVERNMENT OF RECONCILIATION AND NATIONAL UNITY OF THE REPUBLIC OF NICARAGUA AT THE FIRST MEETING OF THE GLOBAL ALLIANCE TO IMPLEMENT THE TWO-STATE SOLUTION
Mr. President,
Dear Representatives of the Countries joining us in this meeting,
From this Blessed and Forever Free Nicaragua, allow me to offer fraternal greetings of the President of the Republic of Nicaragua, Comandante Daniel Ortega Saavedra, of Vice President Compañera Rosario Murillo Zambrana, of the Government of Reconciliation and National Unity, as well as of all the People of Nicaragua.
We also take this opportunity to express our deep gratitude, respect and appreciation to the Kingdom of Saudi Arabia, its Authorities, His Majesty King Salman bin Abdulaziz, Custodian of the Two Holy Mosques, and His Highness Prince Mohammed bin Salman, Crown Prince and Prime Minister, for hosting this meeting. May God bless you and grant you health, peace and well-being.
Nicaragua participates in this space, with great hope and optimism, trusting that it will mark the beginning of a definitive solution to the conflict and thus achieve the foundation of the Palestinian State.
Today we are gathered to address a cause of a political, humanitarian and justice nature, which demands our defense with the utmost seriousness. We are tired now of double standards; it is clear what is allowed and what is forbidden.
We are not here to talk about a solution for refugees; we are here to talk about them returning to their nation. Therefore, we should talk about return, and not about a solution, since deporting and killing them is considered a solution, and therefore the term return should be used instead of solution. Our purpose should be to ensure the return of refugees to their nation, and not to look for other terms to hide the true objective.
In the face of the crimes against humanity that the whole world has witnessed and continues to witness, silence must be interpreted as a form of complicity. But not only is silence complicity, Nicaragua denounces and condemns the governments that continue to finance this genocide, those enabling countries that every day decide to deliver more and more weapons so that the Palestinian People continue to be killed.
Our positions must be unambiguously defined: either we are on the side of the rights of the Palestinian people and the establishment of their free and independent State, or we continue to foment a war of extermination. For Nicaragua, this issue is clear and we will always support the struggle of the Palestinian People in their unquestionable right to Independence, Sovereignty and Self-determination.
We extend our respect to the Palestinian Authority, which has given its best, has made sacrifices and has accepted divisions of its land so that others could inhabit it, like someone who divides their house in two, reserving one half for the guest. Sadly, the guest has usurped the entire house, leaving the original family bereft. It is a clear example of how generosity sometimes confronts ingratitude.
The Palestinian position was born from the commitment to find a comprehensive, just and definitive solution to the conflict with Israel, adhering to all agreements in this framework.
There is no justification whatsoever for any member State of the United Nations to postpone its recognition of the Palestinian State, especially considering the international resolutions that reaffirm a two-state solution and have a practically global consensus.
Silence in the face of the injustices and crimes committed against the Palestinian people is a form of complicity and betrayal of the principles of humanity.
The two-state solution is already an international requirement by virtue of laws, customs and global legitimacy. It is unsustainable to continue ignoring this situation, and history will remember with shame those who contributed to the suffering of the Palestinian people for almost eight decades, remaining silent in the face of the moral, political and human injustices that affect them. Nicaragua will continue its condemnation in all spaces and raise its voice in a firm and unwavering way, against the brutal genocide that is being committed against the Palestinian People.
To remain silent and look the other way in the face of these massacres is in itself a crime. What are we waiting for? Are the thousands of victims of children, women and men and almost one and a half million displaced people not enough to defend justice and put an end to the suffering of the Palestinian people? Does it take more pain for us to wake up? It is time to express our unequivocal support for a Palestinian state. To continue in silence would be a disgrace before God and humanity.
The existence and independence of the State of Palestine cannot be postponed any longer. Nicaragua firmly supports the establishment of a Free, Sovereign, Independent Palestinian State with full Self-determination, in accordance with the resolutions of international legitimacy, with the 1967 borders and East Jerusalem as its capital.
We must not allow a single State Israel to manipulate international legitimacy and put international peace and security at risk. It is time to define clear positions and to move away from double standards on issues of justice and self-determination.
The Palestinian cause has gone far beyond any limits of humanity and ethics for more than 80 years, and our inaction makes us accomplices. It is time to put an end to this tragedy, or else we will continue to contribute to this suffering.
Thank you Very Much
