Detalles del momento: La conciencia
Por: Moisés Absalón Pastora.
La conciencia es el sentido más básico en la sensación externa e interna del ser humano. Puede ser definida como subjetividad, punto de vista en primera persona, capacidad para sentir, habilidad de experimentar, cómo se siente ser algo, la ventana a la existencia o lo que crea la mente.
Tomar conciencia de nuestra vida, no es tarea fácil, aunque es algo que todos los seres humanos traemos desde el inicio de nuestra existencia, solo que lo olvidamos. Cuando lo aprendemos a hacer nos damos cuenta de los tantos patrones de conducta que arrastramos desde los primeros días de la humanidad y los primeros en saberlo fueron Adán y Eva cuando conscientemente mordieron el fruto prohibido y después tuvieron que pagar por desobedecer a su Creador.
Al aprender a tomar conciencia de nosotros mismos iremos descubriendo que existe otra forma de vida que es la responsabilidad que debemos asumir de nuestros actos porque para toda acción hay una reacción.
Así las cosas, si compramos pagamos, es decir debemos tener presente que nada es gratis, que lo bueno y lo malo tiene un precio y así el amor se paga con cariño y de la misma manera el odio, te puede llevar a pagar con la cárcel y frente a lo que tus vísceras pudieran haber causado en los inocentes que afectaste por culpa de tus odios, entonces lo que hiciste no merece ninguna consideración, por mucho que aullé la manada o la jauría que te estimuló a hacer lo que hiciste.
Obviamente que hay conciencia limpia que te permite dormir en paz sabiendo que no estas debiendo nada, que respondes a valores y principios que son la guía imperturbable de tu vida, pero también hay conciencias sucias que te desvelan, que no concilian tu sueño, que te indican que tienes que pagar las cuentas o facturas que te cobran y que se vuelven más insoportables cuando se ignoran, cuando pones cara de yo no fui para pretender engañar a los demás, seguramente a esos que afectaste que pueden ser tu pareja, tu familia, tu empleador, tu trabajo, la sociedad, el país mismo o lo que es peor faltarle a Dios que está en todo, lo sabe todo y lo ve todo.
Yo pienso que la conciencia debe estar al servicio de la vida y como ese servicio es tan delicado debemos tener mucho cuidado con aquellos que nos la tratan de tocar porque la conciencia nace de lo que aprendimos, del espejo que resultaron ser nuestros padres ante nosotros con cuyo ejemplo nos dispusimos a andar, pero en el camino siempre encontraremos a quienes a través de un discurso dirigido, generalmente hacia su molino, nos la quieren manosear y es cuando melódicamente a través de medias verdades y medias mentiras tratan de confundir para llevarnos al redil de sus intereses.
No seré absolutista para decir que todo discurso es malo, por supuesto que no, pero indudablemente existen aquellos que perciben a los vulnerables y entonces se lanzan sobre ellos para convencerlos de que lo blanco es negro, que el odio es más que los que construyen, que la libertad no tiene límites y que podemos hacer lo que queramos, que los medios no importan, que vale poco pasar encima de quien sea para alcanzar las metas que nos proponemos, que las leyes se hicieron para violarlas y que si Dios existe solo está en las iglesias.
Gracias precisamente al discernimiento que el Creador nos dio sabemos que en la vida hay dos caminos el del bien y el del mal y lo que determina cual es el camino correcto es la conciencia y de la misma manera lo que determina el camino incorrecto es la inconsciencia y esto es fundamental entenderlo porque representa una lucha claramente establecida entre el bien que siempre va hacia adelante y el mal que nos quiere atar, detener y anclar porque es la expresión estática de la maldad.
Mientras la conciencia de bien empuja a los individuos a tener un concepto de la vida saludable y amable en la naturaleza de su habitad y lo energiza para proponer y hacer; para ser limpio y honesto de tal manera que se convierta en un atractivo para ser emulado y junto a él materializar esa sinergia colectiva que se vuelve un muro infranqueable contra la oscuridad o el pesimismo, la mala conciencia lo que hace es hacer ver a quien la tiene como un problema en potencia, como la fruta podrida que puede contaminar el canasto, como el individuo amargado y frustrado fácilmente visible porque existe para dañar, para corromper y estorbar.
Muchas veces escuchamos la expresión, cuando se refiere a alguien que dice; “Esa persona es inconsciente no sabe lo que hace” y cuando lo identificamos nos acercamos a ese que a lo mejor no sabe sobre la realidad de algo o sobre un tema y lo ilustramos, le explicamos y que bien si lo sustraemos de la visión errónea que tenía de “X o Y” circunstancia, pero hay otros que están más allá de la inconsciencia y que estando frente al Monte Evers te dicen que no existe porque por el mismo capricho te pueden decir que el sol da frío y que el agua no moja y lo peor es que se sienten triunfantes con sus mentiras o inconciencias y no les importa que todo lo que está a su alrededor los perciba como brutos, ignorantes y necios y muchos de esos son los que aúllan a los cuernos de la luna, gracias a Dios desde afuera, contra la innegable evolución que vive Nicaragua y lo hacen, obviamente no porque tengan razón, sino para que los oigan en Washington, allá en la Casa Blanca, el Departamento de Estado o los adláteres del imperio, para hacerles creer que existen, que son efectivos cuando ellos mismos y desde sus propias frustraciones han reconocido que Nicaragua y el sandinismo los venció a ellos y a sus amos.
La conciencia es siempre buena porque la mala es la inconsciencia y cuando hablo de la conciencia no solo me refiero a los nicaragüenses que tenemos patria, sino aquel connacional que prejuiciado por un montón de locuras que se inventan de nosotros llega al país hasta con temor, sí, porque los bárbaros lo que infunden es miedo al que se deja llevar por las mentiras, pero cuando en respuesta a las campañas calumniadoras y difamatorias lo que se ve son los hospitales mejores hospitales y las mejores carreteras de Centroamérica; cuando se ven los colegios, la educación técnica, las universidades hasta en la profundidad del campo y todo gratuito; cuando se tocan las preciosas obras deportivas, esos majestuosos estadios, las canchas de futbol, las piscinas olímpicas, los belleza de parques que son únicos en Latino América; cuando ven que en la marcha hay construcciones por todos lados y que Managua junto al país hay una explosión de desarrollo, que además de lo hecho se oye hablar de lo que será en más grande aeropuerto de la región, que vienen puertos nuevos y que se ampliaran otros, que ya tendremos carretera cortera y así tantas cosas que son un portazo a la inconsciencia.
Ahora mismo a propósito de todas estas bendiciones que Dios nos permite, teniendo como instrumento a un gobierno que declara ser abiertamente cristiano y además socialista porque distribuye nuestras riquezas y solidario porque acompaña y acuerpa a todo el que padece en sus circunstancias trágicas o de dolor, me relajo últimamente, tras dar por concluidas mis labores periodísticas y parlamentarias, a ver YouTube y qué satisfacción me da seguir a gente nuestra que utilizando obviamente los beneficios que genera esta plataforma se dedica a recorrer nuestro país y junto a los que lo hacen mostrarnos tantas cosas, innumerables obras, bellezas exóticas, potenciales ocultos que se han hecho en Nicaragua y que hablan del esfuerzo de los nicaragüenses que tenemos patria por hacer de nuestro país un remanso de paz, de tranquilidad, de seguridad y de orden porque eso amigos es realmente un tesoro, un diamante, una mina de oro, en medio de un mundo derretido por el fuego de conflictos al que nos ha querido llevar también ese gran culpable y pirómano que desde la Casa Blanca en su inconsciencia ha pretendido e insiste en ello en cavarnos solo porque pensamos diferentes.
Estos nuestros compatriotas que aquí, desde adentro hacen estos documentales sobre nuestra realidad, claro que me fascinan y los admiro y traslado mi respeto a ellos, pero más aún esos chilenos, argentinos, mexicanos, salvadoreños, costarricenses, hasta un venezolano vende patria de su país que pasó por aquí, el tal Oscar Alejandro, y que no dejo de lanzar su venenito, porque no le gustó el monumento a Hugo Chávez ni las banderas roja y negras, pero todos ellos llegaron prejuiciados, todos ellos antes de entrar al país dijeron que les recomendaron no visitar Nicaragua porque era peligroso, que aquí no había libertad, que podían caer presos, que el ejército y la policía estaban tendidos y cualquier tipo de locuras que obviamente alertan a cualquier, pero cada uno de esos generadores de contenido en YouTube o Youtuberos, cuando llegaron e ingresaron al país lo que descubrieron, lo que vivieron y lo que constataron fue otra cosa y no uno que ya tenía una agenda de permanencia definida en su bitácora de viaje tuvo que extenderla por una semana más porque les encantó nuestro país, porque disfrutaron de nuestra hospitalidad, porque se sintieron privilegiados de visitar un país tan evolucionado y seguro como el nuestro.
A esos desadaptados y perros que viven aullando o labrando a los cuernos de la luna que los ignora hay que decirles que aquí lo que hay en Nicaragua es una gran mayoría de hijos de esta patria, no del imperio, que tenemos plena conciencia de la brutalidad que niega nuestra evolución, pero también de quienes nos la quisieron hacer en 2018, y que por más que insistan en reeditar aquellos escenarios dantescos aquí no hay más tren que el que pita, que nuestra revolución evolutiva no tiene marcha atrás, que al bagazo poco caso y que nadie aquí es intocable o está por encima de la ley y como como respuesta a la inconciencia aquel que las hace las paga por lo que con premeditación, alevosía y ventaja ejecutó y no importa el tamaño, la educación, lo rico, lo pobre, el nivel social, la vestimenta que tenga, la religión que profese, si es Obispo o si es Pastor, la preferencia política e ideológica que abrace, lo conocido o popular que pueda ser, si es detenido, si es investigado, si es acusado, si es procesado y finalmente condenado va para la cárcel porque se eso se trata la justicia consciente que aplica la ley no contra el político sino para el delincuente capaz de asesinar a la madre más sagrada, la patria.
QUE DIOS BENDIGA A NICARAGUA.